La belleza de la violencia

Más allá de intertextualidades explícitas con el cine de acción, en Nobody (Ilya Naishuller, 2021) ―filme televisado recientemente en el espacio La película del sábado― funciona todo. Quizás lo más impresionante para algunos sea su protagonista, interpretado de manera genial por Bob Odenkirk, y el acertado, aunque no por ello excesivo, uso del humor negro.

Hutch es un veterano retirado que vive una vida de anonimato en familia. Su vida rutinaria e intrascendente se ve interrumpida por la entrada de ladrones a su casa, la pérdida de confianza total en sí mismo y la búsqueda y el reencuentro con su verdadera identidad.

A partir de ese momento el hasta entonces antihéroe protagoniza una historia llena de mucha acción, con sorprendentes peleas, persecuciones y enfrentamientos muy violentos. Su realizador no escatima en sangre, como un elemento más dentro de la cinta fluye de un bando y de otro, sin afectar, por supuesto, de manera mortal la vida de nuestro héroe.

Ágilmente se van desarrollando los acontecimientos dentro del filme, el gusto por los detalles refiere la certera funcionalidad de un guion bien preparado. El juego entre los códigos de acción y el dinamismo de la banda sonora, convertidos en antítesis dentro de las escenas, resulta uno de los detalles más interesantes.

Pero a pesar de todos estos significativos pormenores no hemos especificado aquel que más motiva el suspenso: quién es Nadie. Más allá de su condición de veterano, supuestamente uno de escritorio, no se conoce su pasado, lo que se sostiene hasta el final de la cinta como uno de los mayores atractivos.

Sin embargo, mantener este misterio no resulta la única seducción de un largo que concibe un personaje principal como una máquina imparable de aniquilación; que expone la caída de un imperio de mafiosos solo con la presencia de tres hombres, uno de ellos, octogenario; y que representa desde una visión muy retorcida la belleza de la violencia.

Nobody no es perfecta, pero en este 2021 se muestra como una opción disfrutable dentro del género.