Rosita Fornés: nuestro adiós desde el cine

Este 10 de junio, a la edad de 97 años, se nos ha ido una de las grandes: nuestra eterna vedette Rosita Fornés. Su muerte, confirmada en horas de la madrugada, aconteció en la ciudad de Miami (Florida, Estados Unidos), rodeada de familiares y amigos.  

Esta gran artista tuvo una fecunda carrera dentro de las artes escénicas como actriz, cantante y bailarina. Nació el 11 de febrero de 1923 en Nueva York, pero desde pequeña se estableció en Cuba, donde comenzó a desarrollar sus aptitudes artísticas. 

Su presencia dentro del séptimo arte fue muy activa y tuvo su primera participación en 1939 en el filme Una aventura peligrosa, de Ramón Peón. En esta cinta cantó la canción cubana Intrusa, compuesta por Ramiro Bonachea.  

Antes del triunfo revolucionario estuvo implicada en cerca de una decena de películas, la mayoría de estas, producciones nacionales y mexicanas. Entre ellas destacan Romance musical (Ernesto Caparrós, 1941), Se acabaron las mujeres (Ramón Peón, 1946), Piel canela (Juan J. Ortega, 1953) y No me olvides nunca (Juan J. Ortega, 1956). 

Luego de 1959 se involucró en diversas filmaciones significativas para la cinematografía nacional, como el popular largometraje Se permuta (Juan Carlos Tabío, 1984), Plácido (Sergio Giral, 1986), Papeles secundarios (Orlando Rojas, 1989), Quiéreme y verás (Daniel Díaz Torres, 1994), Las noches de Constantinopla (Orlando Rojas, 2001), Al atardecer (Tomás Piard, 2001) y Mejilla con mejilla (Delso Aquino, 2011). 

Durante su carrera obtuvo diversos premios y reconocimientos, entre ellos, La Giraldilla (1988), la Orden Félix Varela (1995), el premio del Gran Teatro de La Habana (1988), el Premio Nacional de Teatro (2001), Televisión (2003) y Música (2005). 

Ante la novedad de su fallecimiento, el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos envía a sus familiares y amigos las más sentidas condolencias.