Oscar Valdés
Inició su formación cinematográfica en los años 50, en el cine club de la Sociedad Cultural Nuestro tiempo. Comenzó a trabajar en el ICAIC en 1961 como asistente de dirección y realizó algunos cortos didácticos y notas para el Noticiero ICAIC Latinoamericano. En 1962 y 1963 dirigió dos cortos de ficción en colaboración con Humberto Solás. En 1965 realizó su primer documental. En 1973 dirigió el lagometraje de ficción El extraño caso de Rachel K. En la obra de este destacado documentalista se manifiestan ejemplarmente los rasgos característicos de la llamada Escuela del Documental Cubano, sobresale entre ellos la conjugación eficaz de la ficción y el documental, que maneja con gran fluidez.