“Para hablar del futuro hay que hablar del presente”

El primer panel teórico del 15 Festival Internacional de Cine de Gibara, Cine cubano, desafíos del XXI, aconteció este 8 de julio en la Casa de la Cultura gibareña.

Dicho panel incitó al debate sobre diferentes temáticas, a la vez que constituyó un lujo para quienes pudieron participar del mismo, en tanto permitió concentrar a varios creadores en la misma mesa.

El recién merecedor del Premio Lucía de Honor, Fernando Pérez, introdujo el conversatorio con una reflexión sobre los realizadores actuales, quienes luchan por hacer cine pese a los obstáculos y el desaliento que, en ocasiones, los envuelve.

“Para hablar del futuro hay que hablar del presente”, apuntó el cineasta no sin antes depositar su confianza en la juventud de hoy y en el ICAIC como esa institución que debe seguir apoyando todas las producciones.

“Imagino el ICAIC como un Instituto que pondere el arte primero y la industria después”, agregó el destacado realizador cubano.

Por otro lado, el director de La pared de las palabras invitó a los creadores a enriquecer el Decreto Ley No. 373 Del Creador Audiovisual y Cinematográfico Independiente, el cual quedó aprobado por el Consejo de Estado el pasado 25 de marzo y está publicado en la Gaceta Oficial de la República de Cuba.

Asimismo, el realizador Kiki Álvarez aclaró que los recientes decretos nacieron de las demandas e inquietudes que tenían los cineastas hace años.

“Hubo momentos de distanciamiento y de comunión, pero pudimos superarlos, en buena medida gracias al actual presidente del ICAIC, Ramón Samada, en quien confiamos por su participación en este proceso que todavía no termina. Pero los proyectos leyes solo funcionan en la práctica”, afirmó.

Además, quedan muchos retos por delante, pues el cine cubano carece de proyecciones óptimas para los espectadores, agregó.

“El hombre aún necesita sentarse alrededor de algo que le haga soñar. Por ello, es vital que esto suceda en nuestros cines”, manifestó el director de Sharing Stella.

Por su parte, la productora Claudia Calviño se refirió a la manera peyorativa en la que todavía son tratados los productores.

“Necesitamos equilibrar los conocimientos de los profesionales que hacen cine hoy”, expresó.

El fenómeno de lo independiente

En una industria atípica como la del séptimo arte un Decreto no cambia las mentalidades, ni los prejuicios. Por eso, resulta importantísimo romper los esquemas, tal y como lo ha hecho el joven realizador Carlos Lechuga.

“Quiero agradecer a Fernando y a Kiki por inspirarme. Lo importante en esta profesión, elijas el camino que elijas, es estar acompañado, no perder el rumbo y avanzar, pero con cautela”, resaltó Lechuga.

A su vez, el director del corto Rállame la zanahoria –que concursa en esta edición de FIC Gibara 2019–, Eduardo del Llano, hizo alusión a que muchas veces los creadores independientes no se dan cuenta de la repercusión de su trabajo.

Para finalizar el debate y antes de dar la palabra al público presente, el productor audiovisual Reymel Delgado insistió en la eliminación de las divisiones entre los productores independientes y la instituciones.

“El ABC lo tenemos, solo falta alentar más la diversidad y la sana competencia para rodar mejores cintas”, aseveró.

Ahora, en cuanto al llamado Fondo de Fomento al Cine cubano todos los panelistas coincidieron en que es necesario creer en este, pero no depender exclusivamente del mismo, ya que hay que buscar otras soluciones, ser autónomos siempre que se pueda.

Otras de las temáticas abordadas en este primer panel teórico de FIC Gibara 2019 fueron las mujeres en la industria del cine y la animación como una disciplina que posee sus características y requiere de un mayor nivel de especialización.

Foto: Kevin Manuel Noya