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Exhiben por primera vez filme Red Avispa en Venecia
El filme Red Avispa, del cineasta francés Olivier Assayas, tuvo su estreno mundial en la 76.a edición del Festival de Cine de Venecia. El largometraje está basado en el excelente y abarcador libro Los últimos soldados de la Guerra Fría, del periodista brasileño Fernando Morais y publicado en Cuba por la Editorial Arte y Literatura. El autor reunió el fruto de exhaustivas investigaciones en Cuba y Estados Unidos, sobre todo los acontecimientos alrededor de esta red de héroes anónimos infiltrada en los grupos contrarrevolucionarios de Miami.
Abordar la historia reciente cuando aún viven los protagonistas fue el principal desafío de Assayas. Sin perder la objetividad del libro original y con un evidente respeto por narrar la verdad, la película expone cuanto ocurrió en torno a las actividades desplegadas por los integrantes de la red para obtener información que pudiera impedir acciones terroristas en la isla. El clima de beligerancia e impunidad de esos grupos, la arriesgada labor de los infiltrados, las tensas circunstancias impuestas por el Período Especial, la incertidumbre de los familiares y los agentes son mostrados con ánimo fidedigno y sin distorsión alguna de los hechos.
Assayas, incluido por la revista Cahiers du Cinema a fines del siglo XX en su pronóstico de 20 cineastas a tener en cuenta para esta nueva centuria, posee un estilo personalísimo y en su filmografía predominan los dramas intimistas. La miniserie Carlos y Red Avispa constituyen excepciones en su obra.
El efectivo guion, la edición y la música contribuyen a la inmediata comunicación con el público. El filme evoca por momentos el impacto del clásico Z (1969), de Costa Gavras. Sobresalen las excelentes actuaciones de un reparto internacional de primer nivel, al que entrenaron convincentemente en el llamado acento cubano. La producción recreó de manera meticulosa las locaciones de Miami en La Habana y Gran Canaria.
El brevísimo texto introductorio del filme, quizás innecesario para los espectadores de la isla por el caudal de información y vivencias que poseen, no invalida la repercusión internacional de un filme honesto que revela las interioridades de una lucha silenciosa.